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Este domingo se celebran las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) en Santa Fe, y los ojos del país se van a posar sobre un territorio clave para la política nacional. La lucha del socialismo por retener Rosario y la interna del peronismo a nivel provincial son los grandes atractivos.

Los santafesinos darán el primer paso para elegir al sucesor de Miguel Lifschitz en la Casa Gris, la renovación total de las dos cámaras legislativas y el recambio de la mayoría de los intendentes, presidentes comunales y parte de los concejales.

Según sondeos, la única fuerza política con posibilidades reales de arrebatarle la gobernación al socialismo es el peronismo, que definirá a su candidato en las primarias. El senador nacional Omar Perotti y la ex vicegobernadora María Eugenia Bielsa juegan un mano a mano para alquilar balcones. Será clave que el ganador conserve los votos de su rival y no se trasladen al Frente progresista, como explican los analistas.

En el distrito santafesino, donde se vota con boleta única, la unidad peronista se dio a medias. Aunque no lo manifestó públicamente, Cristina Kirchner optó por apoyar a Perotti, y sus candidatos renunciaron entonces a luchar por la gobernación para formar fila detrás del rafaelino.

Distinto es el panorama en Rosario, donde el justicialismo lleva como único candidato a la intendencia al ex jefe de Ansés Roberto Sukerman, con el apoyo de distintas listas de concejales. Más allá de que hubo charlas hasta último momento, al margen de esta alianza quedó Juan Monteverde, de Ciudad Futura, quien finalmente competirá con ese sello.

Por el lado del gobernante Frente Progresista Cívico y Social, el ex mandatario Antonio Bonfatti buscará repetir el mandato que ostentó entre 2011 y 2015, y lo hará en representación de un bloque que luce sin fisuras aunque sí tiene sus rispideces internas. El gobernador Lifschitz tracciona por ahora desde la boleta de diputados provinciales, mientras sueña con un llamado de Roberto Lavagna para acompañarlo en una hipotética fórmula presidencial.

En tanto, en Rosario sobrecayó sobre la concejala Verónica Irizar la responsabilidad de intentar defender una plaza que el socialismo ocupa desde hace 30 años. La tarea esta vez no será nada sencilla para el oficialismo local ya que en la interna deberá superar a Pablo Javkin, de la lista Arriba Rosario, quien en los últimos años fue parte del Frente aunque con marcadas diferencias con el partido de la rosa.

Cambiemos asoma en la previa como un actor de reparto en estas elecciones. La candidatura del intendente de Santa Fe para la gobernación, el radical José Corral, se dio sin interna con el PRO, lo que le permite concentrar el apoyo de la estructura partidaria provincial y el del gobierno nacional.

A la Legislatura

En cuanto a la Legislatura provincial, renovará las 19 bancas de senadores departamentales y las 50 de diputados, con la postulación de figuras reconocidas de la política local.

Por ejemplo, la lista del Frente Progresista de diputados es integrada por el gobernador y los actuales ministros Erica Hynes, Maximiliano Pullaro, Pablo Farías y Claudia Balagué.

El PJ presenta siete listas, cuyas cabezas son el kirchnerista Leandro Busatto y Luis Rubeo, Silvina Frana, Julio Eggiman, Lucila de Ponti, Claudia Giaccone y Claudio Leoni.

Cambiemos lleva una lista representativa del PRO y el radicalismo, en la que figuran Gabriel Chumpitaz, Alejandro Boscarol, Jimena Solá y Julián Galdeano, que competirá con otra encabezada por la actual legisladora Cesira Arcando.

Otros candidatos con chances son los actuales diputados Rubén Giustiniani (Igualdad y Participación) y Carlos del Frade (Frente Social y Popular); en tanto, insistirá la mediática panelista de TV Amalia Granata en representación de la nómina de Somos Vida, que se identifica con los pañuelos celestes que están en contra de legalizar el aborto.