Un homicidio en zona oeste, una balacera con dos heridos en zona sur
Un hombre armado atacó a tiros al dueño de un lavadero informal de autos, en Molino Blanco, y también hirió de rebote a un vecino. En barrio Godoy, dos hombres en moto asesinaron a tiros a otro.
El lunes cerró con dos episodios de violencia urbana que hicieron revivir los peores días que parecieran haber menguado: dos ataques a tiros, uno en el extremo sur, y otro en el oeste, dejaron el saldo de un hombre muerto y dos heridos de bala.
Con las primeras oscuridades de la tarde noche, los balazos estremecieron al vecindario del barrio Molino Blanco. Frente a un lavadero de Ayacucho 6263, cerca de Batlle y Ordoñez, un hombre que llegó de a pie esgrimió un arma de puño y atacó por sorpresa al morador del lugar, quien vive de los vehículos que lava en ese lugar.
Lo trágico fue que además, en la decena de disparos que el pistolero prodigó la ligó también un muchacho que estaba sentado en la vereda. La escena se completó con la fuga alocada del perro de la víctima, que espantado por los tiros salió corriendo y resultó atropellado por un auto sobre Ayacucho y la cortada Caupolicán.
Javier M., de 38 años, fue derivado al Hospital Clemente Álvarez con cuatro heridas de bala en la zona lumbar, y dos en una pierna. Se encuentra fuera de peligro.
El destinatario de las balas, Osvaldo F., de 47 años, sufrió un solo impacto en el cuello, pero su vida no corre peligro por esa herida. Declaró al arribar al Heca que había sostenido una gresca con un hombre del barrio, según dijo. Y este tomó venganza.
Del autor del ataque nada se sabe, de manera oficial.
Ya hacia las 22, otra ambulancia arribó al Heca con un hombre baleado en el pecho y el cuello. La policía informó que había sido atacado por dos hombres en moto, que lo sorprendieron en la calle, en Campodónico y Uriarte, barrio Godoy.
La víctima, cuya identidad no se suministró pero se dijo que tenía 47 años, falleció poco después, como consecuencia de los 5 balazos que recibió.