Nzambi Matee, la inventora que produce ladrillos con plástico reciclable
Ingeniera y emprendedora, desarrolló una empresa que a partir de desperdicios plásticos fabrica ladrillos que soportan el doble de la carga que los de concreto.
Nzambi Matee es una ingeniera de materiales de Kenia, de tan solo 28 años, que desarrolló una empresa que da respuesta a dos graves problemas de su comunidad y del mundo: la contaminación y el déficit habitacional. Es que Gjenge Makers, como dio a llamar a la empresa, produce ladrillos con desperdicios plásticos. El resultado son unos ladrillos que soportan el doble de la carga que los de concreto.
El desarrollo le valió que el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) la nombre entre los Jóvenes Campeones de la Tierra 2020, un galardón ambiental de la ONU para la nueva generación de ambientalistas que se le otorga a solo a siete científicos, ingenieros, empresarios y activistas de todo el mundo.
La empresa ya lleva recicladas unas 20 toneladas de plástico y tiene capacidad para fabricar hasta 1500 ladrillos por día, dando trabajo a operarios y con materiales sustentables que reducen el daño ambiental.
"Estos agentes de cambio muestran cómo las ideas innovadoras, combinadas con acciones ambiciosas, pueden ayudar a resolver algunos de los problemas ambientales más urgentes, por ejemplo, a través de soluciones para convertir los residuos plásticos en materiales de construcción, producir agua a partir de la humedad atmosférica o motivar a los barcos pesqueros a retirar toneladas de plástico del océano", detallaron en la entrega del reconocimiento.
“En todo el mundo, los jóvenes están liderando el llamado en favor de soluciones relevantes e inmediatas para la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación. Debemos escucharlos”, dijo la directora ejecutiva del PNUMA, Inger Andersen.
“Al entrar en una década decisiva en la que trabajamos para reducir las emisiones y proteger y restaurar los ecosistemas, los Jóvenes Campeones del PNUMA demuestran que todos podemos contribuir, desde donde estemos y con lo que tengamos a mano. Cada acto por la naturaleza cuenta y necesitamos que toda la humanidad comparta esa responsabilidad global”, añadió Andersen.