Comenzó el juicio por la causa Guerrieri IV, el genocidio interminable
Se juzgan en el Tribunal Federal 116 crímenes de lesa humanidad, 62 de los cuales nunca habían llegado a esta instancia. Son 17 imputados que participaron del aparato represivo del Estado en Rosario, durante la dictadura cívico militar.
El canto “como a los nazis les va a pasar, a donde vayan los iremos a buscar”, se escuchó poco antes de las diez de la mañana, mientras se colgaban las banderas por los 30 mil desaparecidos y de HIJOS Rosario en las rejas que dan al frente de los Tribunales Federales (Oroño al 900), a la espera de la primera jornada de juicio por la causa Guerrieri IV. El reencuentro de las militancias en las cuatro generaciones se observó en abrazos pospandémicos, donde faltaron Madres y Abuelas y militantes de derechos humanos fallecidos en estos años, y en el que varios entrevistados coincidieron en diálogo con Rosarioplus.com: “la Justicia se tomó su tiempo para llegar a este juicio, pandemia y burocracia mediante”.
A las once y veinte de este lunes 1° de agosto comenzó la primera audiencia del cuarto juicio en la causa Guerrieri -por Pascual Guerrieri, jefe de inteligencia del Ejército- por las torturas y desapariciones de un total de 116 personas durante la dictadura cívico militar, que sucedieron en seis locaciones de la región a manos de 17 imputados que pertenecieron al destacamento 121 del Ejército y de la Policía Federal. Entre ellos se destacó el rol cómplice de la Iglesia, a partir del testimonio del ex cura tercermundista Santiago Mac Guire sobre el centro clandestino de detención en el Ceferino Namuncurá de Funes, que atestiguó haber sido compañero de detención del desaparecido Eduardo Garat.
Su hija Florencia Garat, militante de HIJOS e investigadora durante años de los hechos, destacó con evidente emoción: "Luchamos todos estos años para llegar acá, y a la vez está el peso de la tardanza de esta instancia, y es doloroso. Esperamos estén los jueces a la altura de las circunstancias. Al haber pasado muchos años, algunos imputados tienen prisión domiciliaria y eso no lo podemos evitar. Investigué con HIJOS muchos años, y hay muchos detalles difíciles de escuchar que se van a ventilar. Y por primera vez nosotros vamos a atestiguar".
La abogada de APDH Julia Giordano destacó que "la de hoy es una jornada de lectura de las acusaciones sobre cada imputado, los delitos y sobre qué víctimas, presentado por la Fiscalía así como cada una de nuestras querellas. Esta causa Guerrieri es una oportunidad para dar cuenta el rol de la iglesia".
Desde la querella de APDH Gabriela Durruty destacó que "son más de 300 testigos presenciales pero además habrá testimonios de otras formas que por diversos motivos no pueden asistir. Veremos si es semanal o quincenal, pero mas de un año llevará seguro". También desde APDH, la querellante Jesica Pellegrini calificó esta causa como “importante", "por ser tantas víctimas, y algunos acusados llegan por vez primera al banquillo, entre ellos policías federales. Será un juicio largo que llevará este año seguro y esperamos tener sentencias en 2023”.
Según se pudo conocer en esta primera audiencia, serán jornadas extendidas -por ser los jueces oriundos de otras provincias-, que se llevarán a cabo los lunes entre las 10 y las 17 en los Tribunales Federales 2 de Rosario. El tribunal de juicio se compone por los jueces Carlos Julio Lascano (TOF 2 Córdoba), María Noel Costa (TOF 2 Córdoba), y Mariela Emilce Rojas (Concepción del Uruguay).
Sobre éstas audiencias, Florencia Garat destacó que se van a desarrollar "en el orden cronológico de caídas", y en ese marco la de su padre Eduardo "fue de las últimas porque esto fue a fines de 1978", y si bien ella y su hermano Santiago serán testigos, adelantó que en otras ocasiones también vendrá "a escuchar a amigues, familiares, compañeros que vienen desde Córdoba y Buenos Aires cuyos padres desaparecieron acá".
En la sala Anexo del Tribunal los familiares de las víctimas esperaron ansiosas a un demorado comienzo de la lectura de síntesis de la causa “Guerrieri Pascual y otros”. Antes del arranque, un defensor reclamó garantías por su defendido como persona mayor, de audiencias reducidas, levantarse para ir al baño y seguimiento de audiencias por videoconferencia -que en el Anexo se vivió entre protestas e ironías de los familiares-. El Tribunal le concedió en cierta medida estas últimas, pero aclaró que “por ser los jueces de otras provincias y viajar en cada audiencia, estas serán extensas, no podemos reducirlas”.
Estaban presentes en las audiencias: Juan Daniel Amelong, Eduardo Constanzo, Marino González Juan Carlos Faccendini, Juan Félix Retamozo, Enrique Andrés López, Roberto Squiro, Osvaldo Tebez, Oscar Giai y Walter Pagano. Siguen las audiencias de forma virtual: Pascual Guerrieri, Jorge Fariña, Ariel Antonio López, Juan Andrés Cabrera, Rodolfo Isach y Federico Almeder.
La secretaria judicial comenzó la lectura en torno a la causa del “plan represivo con epicentro en la Fábrica de Armas Domingo Matheu, el Batallón de Inteligencia 121, y en los centros clandestinos de detención La Calamita, Quinta de Funes, Escuela Magnasco y La Intermedia”. Llevan las acusaciones y pruebas el Fiscal de la Nación Adolfo Villate y las querellas de Hijos Rosario, APDH y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
Los nombres de las víctimas de este juicio: Daniel Héctor Querol, Nelly Balestrini de Larrosa, Sonia Rosa kindrasiuk, Gregorio Larrosa, José Enrique Nelio Animendi, Antonio Huerta, Horacio Huerta, Graciela Susana Capoccetti, Ricardo Alberto Massa, Susana Beatriz Becker, Abel Argento Fontaine, Clara Ruth Argento Fontaine, María de los Angeles Castillo Cano, Roberto Miguel Valleto Olivari, Olga Beatriz Ruiz de Bordesio, Mario Eduardo Bordesio, Mario Alberto Ramos, Emilio Etelvino Vega, Susana Busaniche, Graciela Busaniche, Pedro Pablo Delgado, Gustavo Adrián Rodríguez, Olga Lilian Vaccarini, Mónica Marta Cappelli, María Isabel Salinas de Bosso, Carlos Alberto Bosso, Miguel Angel D’Andrea, María Ester Ravelo, Gustavo Adolfo Pon, Irma Elena Montenegro, Ricardo Luis Franco, Domingo Laborde, Hilda Elena Miekle Rivas, José Alberto Madeo, Alberto Corazza, Alberto Galarza, Susana Elena Díaz, María Graciela Eier, Gustavo Guillermo López Torres, María Irma Ferreyra, Omar Fernando Bravo, Juan Carlos Amador, Santiago Mac Guire, Roberto Vicente Pistacchia, Jorge Ramón Fabián Peralta, Norma Horizontina Coutada Rosés, Mario Eduardo Menéndez, Guillermo Fernando Godoy, Adriana Elsa Tasada, Hugo Alberto Megna, Eduardo Garat, Raúl Luis Bustos, Daniel Adolfo Tripodi, Víctor Jorge Lowe, Segismundo Martínez, Bernardo Alfredo Depetris, Carlos Schreiber, Isabel Soto de Cian, Héctor Cian, José Alejandro Ruggero, Marta del Pilar Luque e Irma Edith Parra Yakin.
Las 54 víctimas que podría quedar afuera del juicio
La causa Guerrieri IV está sujeta todavía a sufrir un cambio no menor: del total de 116 víctimas mencionadas, puede ocurrir que sólo se avance sobre los casos de 62 (los mencionados en el párrafo arriba), ya que se espera un peritaje de salud mental sobre una de las personas que se encuentra acusada pero al momento no fue a juicio. Se trata de José Luis Troncoso, a quien se investiga como responsable de delitos de Lesa Humanidad en la Quinta de Funes y en la Escuela Magnasco, y quien padece de Parkinson. Si esta persona resulta inimputable, 54 víctimas no serán de la partida.
La abogada de la querella en nombre de APDH Julia Giordano explicó que “la defensa de Troncoso viene asegurando que él no tiene la capacidad de comprender los alcances del juicio, pero esto no se ha probado con los exámenes médicos. El párkinson que tiene no significa un deterioro, y es imputable al menos hasta que se demuestre lo contrario. Esta semana será la pericia que determine si puede o no ser parte”.