En 22 años, salieron 390 presos con permiso y nunca volvieron
Luego de que se entregara el prófugo Ricardo Albertengo, acusado por la muerte del policía Mauro Mansilla, se generó un debate público sobre los convictos que se encontraban prófugos tras tener la aprobación de salida de un juez. Los números alarman
El asesinato del policía Mauro Mansilla y la detención posterior del señalado como asesino, Ricardo Albertengo, quien pese a estar condenado se encontraba prófugo de la Justicia tras no haber vuelto de una salida transitoria, puso sobre la mesa el debate sobre cuántos delincuentes beneficiados con salidas transitorias no regresaron jamás tras las rejas.
Los números son alarmantes: en 22 años, de 5436 presos a los que se le dictaron salidas de diversa índole, 390 de ellos se encuentran prófugos. Las cifras fueron confirmadas por altas fuentes tribunalicias a Rosarioplus.com.
“Desde que se creó el Juzgado de Ejecución Penal en 1993, fueron 5436 las salidas transitorias. Por falencia del sistema informático no se precisa cuántos de ellos ya cumplieron condenas”, detalló la misma fuente. Puntualizó: “De este total se sabe que son 390 las personas que no regresaron al Servicio Penitenciario. Por lo que sería un 7,17 por ciento, un número relativamente bajo”, precisó.
Existen distintas clases de salidas a los convictos (transitorias convigilancia policial, transitorias con familiar responsable, laborales o de asuntos personales). Se otorgan siempre bajo el criterio de buena conducta y cuando ya se ha cumplido una buena parte de la condena. Pero desde Tribunales admiten que “existen deficiencias en el sistema informático, que no diferencia los tipos de condenas, su realidad actual, nacionalidad ni mucho menos”.
En el caso de Ricardo Albertengo, se detalló que en su escape anterior, se encontraba bajo custodia policial, pero cuando volvió a fugarse en julio de 2015 se encontraba bajo responsabilidad de su esposa, quien al ser interrogada manifestó no saber dónde se encontraba.
El mecanismo luego de que un convicto no regresa a término a la Unidad Penitenciaria implica que desde esa Unidad se avise a la jueza de Ejecución, quien realiza un pedido de captura a una dependencia de la Unidad Regional II que se dedica a la búsqueda de prófugos, la cual notifica a todas las comisarías y a las fuerzas operativas del Comando Radioeléctrico. En algunos casos también se da aviso a unidades regionales de otras ciudades de la provincia, así como a provincias linderas.