POR KEVIN DOLCE

Barrio Martin tuvo cine propio allá por la década del '30. El cine Oriente, que abrió en 1931 su sala de Mendoza y 1º de Mayo. 

Al mes de abrir sus puertas inauguró un equipo sonoro, todo un adelanto para la época, y pronto se ganó el favor de todo el barrio que concurría a sus funciones. Esa etapa duró hasta marzo de 1932. El cine tomó un impasse, cerró y reabrió al mes siguiente pero con nombre nuevo: Crystal Palace.

La memoria del lugar evoca una característica impar de esta sala situada frente a la plazoleta Florencio Sánchez: realizaba rifas gratuitas con importantes premios que se sorteaban en sus matinés de cada domingo. 

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Este espacio cultural no duró mucho, de todos modos. En 1940 el edificio cambió de manos, lo compró la Asociación de Industriales Panaderos y afines de Rosario. Desde entonces y hasta que empezó la demolición a finales de 2022 conservaron la fachada, el salón principal y el escenario. 

Esta entidad alojó allí su sede administrativa y hasta poco tiempo antes también lo alquilaba como salón de fiestas. Pero la inercia de la economía y el desarrollo inmobiliario de la ciudad hizo que los panaderos decidieran vender la propiedad de Mendoza 529 a una constructora. 

Llegó la demolición y ahora preparan detrás del vallado de seguridad una nueva torre de departamentos.

El viejo Cine Oriente nunca entró dentro del catálogo patrimonial municipal que lo hubiera preservado de la piqueta. Pronto solo quedará la memoria de lo que fue.