__tadevel:head__Internet es sin dudas un mundo lleno de posibilidades revolucionarias. Nos permite conectarnos, crear, y explorar de maneras antes impensadas. Pero no todo es color de rosas en el mundo virtual que tanto amamos: el mundo virtual recopila y guarda información personal que no siempre quisiéramos que sea de acceso público. Así como advertía un personaje de la película sobre Facebook, La Red Social: “Internet no está escrita en lápiz, sino en tinta”. Es decir: no es tan fácil borrar lo que se deja en el mundo virtual. 

La mayoría de las personas manejan múltiples cuentas en diversas plataformas en red. Cuentas de correo, home banking, redes sociales, registros en mailings, suscripciones varias. La mayor parte de nuestra vida está atada a Internet, mucho más de lo que nos gustaría pensar. Entonces, ¿qué pasa cuando queremos que alguno, o todos, nuestros datos desaparezcan por siempre del mundo virtual? El reciente caso del fallo judicial que pretende obligar a Google a dar de baja el video viral del chico argentino al que le gustaba el arte, por ser considerado objeto de cyber-bullying, hizo pensar a varios.

Si bien algunos triunfaron contra el monstruo virtual y lograron que imágenes, videos o información privada en particular fuera dada de baja definitivamente de Internet por comprometer su intimidad, otros no tuvieron tanta suerte. Una norteamericana que había sido víctima de doxxing (práctica hacker de recabar y publicar información privada de una persona como domicilio y número de documento) quiso desaparecer del mundo virtual y se encontró con una sorpresa: sitios como Wordpress, Evernote, Blogger o YouTube no permiten borrarse de sus registros tan fácilmente. ¿Quieren asustarse en serio? Para darse de baja definitavamente de Netflix, es necesario contactar directamente a sus servicios de atención al cliente, y que incluso entonces podrían negarse a borrarla.

Existen servicios como JustDeleteMe (“Sólo borrame”), que permite saber qué tan fácil o difícil (o simplemente imposible) es borrar tu cuenta y tus datos de un determinado sitio web. La respuesta a prior parece ser una: eliminar todo registro de tu actividad en línea, simplemente no es posible. A menos que seas un hacker experto en encriptar datos. ¿Cómo controlar un poco, entonces, la cantidad de información personal que Internet guarda? Configurar las cookies y la privacidad, por ejemplo, prevendrá que Google registre nuestras ubicaciones históricas y los datos que dejamos en los formularios.