Se estrena en España "Competencia oficial" de los argentinos Cohn-Duprat
"La primera premisa fue que se podía filmar sin tener que cortar y hacer una película donde uno pueda degustar ese momento único de la actuación, que siempre se ve prefabricado", aseguraron los directores.
“Competencia oficial”, película de los cineastas argentinos Mariano Cohn y Gastón Duprat que tras recorrer festivales internacionales se estrenará el viernes en cines españoles con un estelar elenco encabezado por Penélope Cruz, Antonio Banderas y Oscar Martínez.
En el filme, Banderas y Martínez dan vida a dos actores que entienden su profesión de manera totalmente opuesta y terminan trabajando con la excéntrica directora Lola Cuevas (a cargo de la actriz española), lo que deriva en una lucha de egos alentada por el peculiar carácter de la realizadora.
Durante la presentación de prensa del filme en Madrid, Cruz reveló entre risas a la agencia Europa Press que “un director me preguntó totalmente en serio si me comía la ropa que no me gustaba y que me lo preguntaba porque trabajó con una actriz que cada vez que intentaba convencerla para llevar una camiseta determinada o unos pantalones, se iba corriendo por el bosque destrozaba a bocados la vestimenta que no le agradaba".
Banderas, por su parte, apuntó que los egos de los intérpretes en ocasiones les llevan a pedir cosas "alucinantes" para "crear un halo alrededor".
"A veces -y eso que en ocasiones ni siquiera son ellos, si no sus agentes- te piden una tarta de 'nosequé', que ni les gusta, pero la piden todos los días, para que se genere alrededor de ese actor esa cosa de 'desayuna con langostas'...", ironizó.
La dupla Duprat-Cohn que desde 2008 generó títulos como “El artista”, “El hombre de al lado” y “Querida, voy a comprar cigarrillos y vuelvo”, entre más, revelaron que esta película surge de la llamada de los propios Banderas y Cruz, quienes habían visto su trabajo en “El ciudadano ilustre” (protagonizada por Martínez) y querían "hacer una película para divertirse".
"La primera premisa fue que se podía filmar sin tener que cortar y hacer una película donde uno pueda degustar ese momento único de la actuación, que siempre se ve prefabricado", aseguraron los directores.