En Empalme Graneros dan clases en el patio por falta de aulas con ventilación
Es la Escuela 251, que estuvo una semana sin clases por falta de luz y de agua. Las docentes señalan que el vínculo de la presencialidad es necesario, "pero no en estas condiciones".
De la mano de la suba de contagios y el ingreso a la segunda ola, se instaló el debate por la presencialidad en las escuelas. Desde el Estado provincial, aseguran que harán todo lo posible por mantenerla, mientras que los gremios docentes pidieron suspender la presencia en las aulas en los departamentos con mayor riesgo epidemiológico. En este marco, Amsafe Rosario realizó una protesta este miércoles en la puerta de la Escuela secundaria 251, en el barrio Empalme Graneros.
Allí, RosarioPlus habló con Mariela Biase, una de las delegadas de la 251: “Decidimos hacer esta convocatoria porque si bien la dirección de la escuela viene haciendo gestiones ante el Ministerio de Educación, no aparecen las respuestas. La semana pasada llegamos al extremo de tener que suspender las clases, por falta de luz, de agua y de gas”.
La docente agregó: “Ahora que vinieron los medios, podrá visualizarse lo que venimos planteando hace tiempo, que es el hecho de que nos faltan salones en condiciones para dar clases como corresponde durante esta pandemia. Tenemos más de 500 alumnos, con cursos en los que tenemos que ubicar a más de 10 por burbuja, que es el máximo recomendado”. Durante el acto, se pudo advertir también que hay un sistema de rejas -que se había puesto en alguna oportunidad para evitar robos- que ahora impide la ventilación cruzada. Se prevé reemplazarlas, pero al momento no está hecho el trabajo y no están habilitados los salones.
“Desde Educación nos pidieron que demos clase en los dos patios, pero tenemos que ubicar a los chicos todos juntos y no se respeta la distancia, como ustedes lo pueden ver. Además, tenemos cortes de luz muy seguido y al quedarnos sin luz, el agua no llega al tanque. Por lo cual, en esos momentos tampoco tenemos agua, que ya de por sí el servicio está complicado por una conexión clandestina con una canchita de fútbol en el barrio. Y así, como los baños de los alumnos no tienen agua, usan el de los profesores”, señalaron a RosarioPlus.
El problema del gas,. según explicaron las delegadas, se origina en un robo que sufrió la escuela, en la que se rompió una conexión y el servicio aún no fue reparado
Finalmente, Biase se refirió sobre el futuro de la presencialidad, en este contexto de la pandemia con suba de casos en la ciudad: “Nosotros a la presencialidad la necesitamos, lo hemos dicho siempre, porque es lo mejor para el vínculo de los chicos con el aprendizaje. Pero no en estas condiciones”.
Desde Amsafe Rosario informaron que luego de realizada la protesta, llegó personal de la EPE para reponer la energía. "Se fueron los medios, que salimos con este problema en las radios y la televisión y por fin vinieron a hacer el arreglo", dijo la delegada docente.