La comunidad de La Vigil se movilizó en defensa de la biblioteca y sus escuelas
Docentes, estudiantes y vecinos sacaron su inquietud a la calle, ante una situación económica apremiante que se traduce en alquileres onerosos que amenazan la continuidad de la entidad cultural
Ante la falta de respuestas concretas por parte del gobierno provincial en relación al desfasaje del alquiler de los inmuebles, la comunidad de la Biblioteca Vigil se movilizó este martes en Alem y Gálvez bajo la consigna “La Vigil Resiste”. Advierten que la continuidad del proyecto institucional y de las ocho escuelas que funcionan en sus edificios están en riesgo.
Entre los reclamos más urgentes se encuentra la “recomposición del alquiler equivalente al valor originalmente pactado”. También exigen “que el Estado se responsabilice por los daños a los edificios y realice las obras de mantenimiento para que funcionen correctamente las escuelas” y plantean la necesidad de una Ley de Reparación Histórica “por el genocidio cultural que sufrió la institución”.
La Biblioteca Vigil fue intervenida y desguazada por la dictadura cívico-militar desde 1977 y, en 1980, el Estado provincial se apropió de la titularidad de los edificios. La ley Nº 13.302 de 2012 devolvió parte de los inmuebles -donde funcionan las escuelas- a sus legítimos dueños y se determinó que el Estado provincial sea locatario de los mismos.
Sin embargo, desde la Biblioteca vienen denunciando que dicha devolución “se efectuó en las peores condiciones materiales” y que estos espacios no tuvieron el debido mantenimiento ni mejoras edilicias requeridas en más de 30 años de usufructo.
A esto se suma la advertencia de que el alquiler que se abona quedó totalmente desvalorizado, representando sólo la quinta parte de lo acordado hace 10 años, lo que pone en riesgo el funcionamiento de la institución. Pese a que la Provincia admite la situación, no se logró ninguna solución. “Si a Vigil no le conviene, que no nos alquile los edificios”, es la respuesta que reciben los directivos.