Paulo Dybala y Oriana Sabatini se casaron el pasado sábado en el Dok Haras de Exaltación de la Cruz. La exclusiva boda contó con 300 invitados y fue organizado por la wedding planner, Claudia Villafañe. Una de las condiciones fue que los invitados no sacaran fotos, sólo oficiales. Es por eso que recurrieron a una inventiva forma de evitarlo.

Lizardo Ponce, amigo de la pareja, contó el método. “Te daban una bolsita y vos metías ahí el teléfono. Arriba tenía una alarma como las que ponen en las prendas en los locales de ropa. Te lo agarraban y vos no podías usar las cámaras”, comenzó. Es decir, podían usar la pantalla del celular, pero las cámaras estaban tapadas. 

“Tampoco podías usar la cámara para hacer una selfie... ¿Quieren que les muestre una selfie de esa noche para que vean cómo salían?”, agregó y mostró una foto tomada en el evento. 

Sin embargo, Lizardo explicó la ingeniosa alternativa que propusieron Paulo y Oriana: “Algo que me gustó es que algunos llevaron sus cámaras analógicas con rollo. En cada mesa había dos cámaras que algún integrante podía usar. Después las devolvías y ellos tendrán las imágenes. Yo usé la cámara”.