El gremio Amsafe anunció que los docentes públicos llevarán adelante un paro de actividades el próximos jueves 5 de septiembre. 

La decisión tiene que ver con el rechazo del sindicato al proyecto de reforma previsional que impulsa el gobierno provincial y que se conoció a fines de la semana pasada.

Además de un paro por 24 horas, Amsafe convoca a una movilización y concentración ese mismo jueves frente a la Legislatura provincial, lugar en el que se definirá si el proyecto sale o no. 

X de AMSAFE La Capital

El envío del mensaje del Poder Ejecutivo santafesino a la Legislatura ratifica la posición que con absoluta claridad expresó la AMSAFE oportunamente, es un proyecto que lesiona fuertemente los derechos de los trabajadores docentes activos y jubilados como en los años 90”, señalaron desde la entidad.

En ese sentido, agregaron: "Comienza con una declaración de emergencia previsional y establece "aportes solidarios" que no solo impactarán sobre los activos, sino que avanza con un fuerte recorte sobre los magros ingresos de jubiladas y jubilados". 

Desde el gremio también informaron que este martes a las 10 habrá una conferencia en la explanada de Legislatura para rechazar el iniciativa del Ejecutivo. Además, a través de un comunicado explicaron:

El famoso déficit de "La Caja" es ficticio, y los actuales desequilibrios se están generando principalmente por la creciente deuda de Nación, la gran cantidad de trabajadores precarizados en el estado provincial, municipal y comunal, la pérdida de poder adquisitivo, la parte del salario no remunerativa y la falta de fiscalización y cobro de deudas.

Si bien, se incluyeron a los sindicatos en la Comisión de Análisis del Sistema Previsional, no se tomó en cuenta ninguna de nuestras posiciones que fueron contrarias a todos los aspectos del proyecto de reforma y nunca se habló de declaración de emergencia, "borrando con el codo" lo votado hace pocos años.

Analizando el Mensaje 5115/24 se manifiesta la intención de ampliar aportes, extender el periodo laboral, anular derechos, desconocer particularidades, delegar facultades legislativas al ejecutivo, retrasar 60 días la movilidad, entre otras cosas, en definitiva, es la peor reforma posible: los trabajadores haríamos más aportes, trabajaríamos más años y ganaríamos menos como jubilados.