El movimiento del aeropuerto aumentó 40 por ciento en un año

El Aeropuerto Internacional de Rosario Islas Malvinas (AIR) registró en los primeros seis meses del año un 40,6 por ciento más de movimiento respecto al mismo período del año anterior. La implementación de nuevas rutas de cabotaje de Aerolíneas Argentinas, y nuevos destinos internacionales de otras empresas, dieron el impulso al crecimiento.

Desde hace unos cuatro años, el aeropuerto comenzó a trabajar para posicionarse como una plaza fuerte en el interior del país, mediante la ampliación de frecuencias, destinos y amparado en buenas condiciones estructurales. Iguazú, Bariloche, El Calafate, Brasil, son sólo algunas de las propuestas turísticas a las que se puede acceder desde Rosario. Así, los números comenzaron a despegar, año tras año, un proceso que por ahora parece no tener techo.

El crecimiento en el primer semestre de 2015, en comparación con el mismo período del año anterior, es sustancial. Así lo demuestran las cifras de la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac). En 2014, el movimiento total que incluye arribos, embarques y pasajeros en tránsito, tanto nacionales como internacionales, fue de 108.988 pasajeros. En 2015, se estiró a 153.206, es decir, un 40,6 por ciento más. 

Fuente: Administración Nacional de Aviación Civil (Anac). 

Cuestión de integración

Lejos quedó aquella pelea por la no inclusión de la ruta internacional de Lima, trasbordo importante respecto a la conectividad con el mundo. Ese fue un punto de inflexión: por un lado les restó pasajeros en lo internacional, por otro les sirvió para demostrar la potencialidad de destinos nacionales. Buenos Aires se quedó con la pulseada y conservó la centralidad. A cambio, se instauró un viaje diario a Ezeiza para facilitar la conexión. 

Desde la secretaría de Transporte de la Nación, que fogoneó mediante Aerolíneas Argentinas el movimiento del aeropuerto, Alejandro Ramos aclaró a Rosarioplus.com: “Aerolíneas tiene el rol de integración del país, no es sólo conectividad sino un estímulo a la actividad. Queremos un feedback: que la región viaje por ejemplo a Bariloche, pero que ellos vengan a Rosario también. O sea, un turismo receptivo”.

“El esfuerzo está dando resultados, y el aeropuerto hoy no tiene techo. Es fundamental trabajar en una estrategia de captación del turismo local y dejar de mirar a Buenos Aires”, explicó Ramos.