Un renunciamiento sin heroísmos
Hay una gran diferencia entre la renuncia de Mauricio Macri a ser candidato a presidente de la Nación -así lo comunicó ayer en un video en redes sociales- y la posibilidad de que Alberto Fernández lo imite como quiere el kirchnerismo casi de manera unánime. Primero porque el PRO tiene tres precandidatos bien plantados y lanzados: Horacio Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal. ¿Cuáles son los precandidatos lanzados del Frente de Todos?
Para que el presidente se baje hay que generarle un escenario que lo obligue. Eso por ahora no sucede y por eso el Jefe de Estado mantiene sus expectativas, aunque sea para no capitular tan fácil sobre el final de su gobierno lleno de problemas internos y externos.
Pero sí, el peronismo debería prestar más atención a lo que pasa enfrente y descansar un poco la vista de la minucia entre sus filas. El Frente de Todos aún no decide si le conviene habilitar una Paso nacional bien potente o cierra filas como hará detrás de Axel Kicillof en provincia de Buenos Aires.
Los costos de inhibir las internas ya se vieron en las legislativas de dos años atrás, donde las autoridades del peronismo bajaron al menos un centenar de listas de precandidatos a diputados y la marca quedó atrás por poco de Juntos por el Cambio que lo llevó a Diego Santilli como cabeza de lista. Estos son comicios para Ejecutivo, es cierto, pero la estrategia hay que verla.
Macri hizo lo que ya había hecho Cristina Kirchner. Pero los efectos son diferentes porque el paso al costado de la vice generó una extendida orfandad en el Frente de Todos; mientras que el paso abajo del escenario de Macri potencia a dos candidatos que ya están en el ring. El expresidente toma la decisión después de fortalecerse dentro del espacio partidario que sin dudas conduce. Los intentos por pasarlo a retiro no prosperaron y tanto Larreta como Bullrich tuvieron que ir en procesión al country de Cumelén en más de una oportunidad.
Que Macri no figure en la boleta no quiere decir que no vaya a jugar su poder de cara al proceso electoral de este año. Su renuncia está relacionada con algunas garantías que obtuvo en los últimos días y que antes no tenía. Larreta, Bullrich y Vidal se enteraron unos minutos antes que el público en general de la decisión de Macri. Los números, las encuestas y la sombra de Javier Milei también influyeron en la decisión final.