En el primer gran triunfo legislativo de Javier Milei en su presidencia, el Senado le dio sanción definitiva a la ley “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” y el Paquete Fiscal, en una ajustada votación en general que culminó 36 a 36 y que debió desempatar la vicepresidenta Victoria Villarruel. Luego, los senadores procedieron a votar de manera individual cada artículo.

La sesión estuvo marcada por el clima de intensa tensión y violencia que se vivió en los alrededores del Congreso, con una fuerte represión por parte de las fuerzas federales a la gran cantidad de manifestantes que se habían acercado al Palacio Legislativo para hacer escuchar a los legisladores el repudio a la ley que estaban por votar.

Villarruel desempató y el Senado dio sanción definitiva a la Ley Bases
Villarruel desempató y el Senado dio sanción definitiva a la Ley Bases

Con esta ayuda por parte del Congreso de la Nación, Milei ahora cuenta con todas las herramientas que solicitó desde el comienzo de su gestión, incluyendo ejes que habían despertado polémica en opositores -e incluso en dialoguistas que igualmente dieron su voto positivo- como la reforma laboral, privatizaciones, el RIGI y facultades delegadas, entre muchas otras.

En contraparte, solo unos pocos artículos fueron retirados o sufrieron modificaciones en el dictamen finalmente votado en general, mientras se aguardaba por el desenlace de la votación en particular.

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¿Qué artículos quedaron en la Ley Bases?

Al momento de la aprobación de la votación en general, uno de los ejes que habían sufrido modificaciones era la eliminación de los artículos 226 y 227 que derogaban la moratoria previsional, por lo que se mantiene la ley que establece un plan de pagos para aquellos trabajadores que no pudieron reunir los 30 años de aportes.

El otro tiene que ver con las privatizaciones, y es el retiro de tres empresas públicas de la lista incluida por el Gobierno de entidades a vender.

Estas son Aerolíneas Argentinas, Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina (RTA), aunque de igual manera sí se mantuvieron las privatizaciones Aguas y Saneamientos Argentinos SA (Aysa),  Belgrano Cargas y Logístico S.A, Sociedad Operadora Ferroviaria y Corredores Viales.

Así también, permaneció incluida la estratégica empresa Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima (Nassa), aunque en ese caso se trata de un capítulo que fija que solo se podrá organizar un Programa de Propiedad Participada (PPP) y colocar una clase de acciones para ese fin, como así también se establece un mecanismo similar para el Complejo de Yacimiento Carboníferos Fiscales.

Entre los ítems que también quedaron incluidos en la ley final, se encuentra la declaración de la emergencia pública por un año en materia administrativa, económica, financiera y energética, que le otorga al Gobierno una gran cantidad de facultades delegadas para poder hacer y deshacer a gusto.

También resultó ileso el Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones (RIGI), donde solo se reformuló el artículo 163 para excluir el apartado de dejar nula toda norma provincial que se oponga al RIGI, y entonces cada provincia deberá decidir su adhesión o no al mismo.

En cuanto al Paquete Fiscal, se volvió a incluir el monotributo social (eliminado en diputados) y se incrementaron los topes de cada categoría, mientras que en bienes personales se aumentó 20% la alícuota del impuesto para aquellos que entraron en el blanqueo.

Sobre Ganancias, solamente las provincias patagónicas lograron una modificación, ya que para Chubur, Neuquén, La Pampa, Río Negro y Santa Cruz se aumentó 22% el mínimo no imponible y Tierra del Fuego quedó excento.

Además, en los artículos referidos al blanqueo de capitales se extendió de 5 a 10 años la prohibición para ingresar al mismo de funcionarios públicos, familiares o convivientes, como así también se removió el blanqueamiento de criptomonedas.