La Estación Rosario Central Córdoba, por donde corre el tren de la firma estatal Belgrano Cargas y Logística rumbo al puerto, ya inició con las tareas de restauración que mantendrán el valor histórico del edificio con sus rasgos afrancesados. 

Luego de 45 años sin recibir ninguna intervención importante ya está en camino para mostrar una nueva cara al barrio que la vio nacer, y que últimamente viene mostrando cada vez más signos de una importante reactivación. Nuevos edificios, mayores espacios verdes, más comercios. 

Dato no menor a tener en cuenta: el gobierno provincial tiene pensada la Estación Central Córdoba como punto final en la conexión norte-centro-sur dentro de la primera etapa del Tranvía Metropolitano. De todos modos, habrá que esperar: recién se está en proceso de licitación para contratar a una consultora que desarrolle alternativas de trazado y determine la ingeniería básica.

Por lo pronto, en el vecindario se muestran contentos y expectantes con la noticia de la remodelación. Muchas voces a favor, y muy pocas en contra, quizás cierta nostalgia de querer que el barrio siga siendo un barrio y no una zona más comercial y de paseo público, que es a lo que se encamina. 

Rubén Álvarez es un comerciante del rubro gastronómico que lleva 15 años en la zona. Al ser consultado por Rosarioplus.com, se mostró contento con la restauración de la estación. “Lo de la estación es algo más que se suma, que está buenísimo porque es un edifico hermoso y está bueno que se conserve su valor patrimonial. En su momento se había hablado de que se iba a instalar el casino acá y luego no se hizo. La verdad que mejor y que ahora se pueda hacer esto”, expresó.

“Hace nueve años que tengo El Entrerrianito y quince años El Entrerriano. Cada vez se trabaja mejor”, celebró, en relación a la reactivación de la zona. “La verdad es que esto no tiene nada que ver con lo que era antes. Todo el lugar se viene embelleciendo y cada vez hay más clientela, así que estoy contento con las reformas que continúan”, expresó.

En el mismo sentido Jorge, dueño de El Charrúa, un minimarket ubicado en 27 de febrero y Buenos Aires, analizó que “está más linda la zona y lo de la estación está bueno”. Y agrega que “antes eran tapiales y casas tomadas acá en frente”, pero ahora “tenemos un parque al que la gente viene, lo disfruta y acá se trabaja bien”.

Sin embargo, a algunos les gusta menos la idea de que la zona cambie. Sol tiene 31 años y vive ahí desde que nació. Asegura que extraña un poco la impronta más barrial que tenía la zona. “Era más tranquilo, ahora hay más movimiento y eso se extraña un poco, aunque por el lado comercial está muy bueno”, reconoce.

“Lo de la estación es re lindo. Yo me acuerdo que cuando era chica era un lugar mucho mejor tratado, un espacio de paseo familiar habitual para nosotros. Yo me la pasaba en los trenes, que te dejaban entrar a las máquinas”, recordó y agregó que “estaría bueno que se recupere todo eso”.