Ruth, una mirada luminosa sobre la vejez en la nueva obra de Adriana Riva
La nueva novela indaga entorno a una etapa de la vida estigmatizada, poco deseada, y le quita el monopolio al discurso médico, que pareciera ser el único habilitado para contarla. Hablar de la vejez es también hablar de una etapa de liberación, asegura la autora en esta entrevista.
Ruth es el nombre de la nueva novela de Adriana Riva. Este viernes estará en la ciudad para presentarla en Mal de Archivo (Urquiza 1613) y en diálogo con Rosarioplus.com contó los detalles de este nuevo texto, en el que indaga sobre una etapa de la vida poco explorada en la literatura y hasta estigmatizada: la vejez.
La autora se muestra entusiasmada con la presentación en la ciudad y no esconde su afinidad con Rosario. “Es una pequeña Nación de genios”, afirma y revela que la misma declaración aparece en el libro pero en la boca de Ruth, su protagonista de 82 años. Con esta mujer mayor, judía, Adriana muestra un aspecto luminoso de la vejez. Y también liviano, ya sin tener que cargar con el peso de construcciones laborales, familiares. “Ruth en un momento dice que siempre vivió medio como con un edificio sobre la cabeza, con mucho peso, mucho armado, mucho por sostener”, cuenta la autora y asegura que ahora “Ruth hace lo que tiene ganas”.
– ¿Sobre qué trata Ruth?
– Adriana Riva: La novela trata sobre una mujer, Ruth, como el título, que está ya en el umbral de los 80. Tiene 82 años, es viuda, vive sola, es una mujer judía muy interesada por el arte que tiene, dos hijos y dos nietas, pero que son personajes bastante secundarios en la novela y en su vida también, porque ya están grandes y no son el eje de su vida. Lo que yo tenía ganas era de escribir una novela sobre la vejez, porque me parecía que tal vez no estaba tan explorado se tema en la literatura. Y no le refiero a la vejez de los achaques, que los hay y la novela también los presenta, sino a una vejez un poquitito más luminosa.
– ¿Por qué el nombre Ruth?
– AR: Bueno, Ruth es un nombre acorde a la edad que tiene la protagonista, no conozco ninguna Ruth que sea menor de 60 años es como llamarte Graciela o Marta, dan la sensación de ser nombres de mujeres mayores. Y por otro lado es un nombre muy judío. Y justamente esas dos características son muy importantes en el personaje, la definen bastante, así que ese nombre me parecía que contenía un montón de lo que Ruth es.
– ¿Puede ser que haya una pregunta que recorra la obra?
– AR: Si hay una pregunta supongo que es qué tiene para ofrecer la vejez que es, con suerte, hacia dónde todos vamos. ¿Es el fin? No lo veo así. Con los avances de la ciencia, los estilos de vida actual, la vejez es una etapa cada vez más amplia. Y lamentablemente no se habla mucho de ella y cuando se habla de lo hace siempre de una manera más bien despectiva o avergonzada. Nadie quiere ser viejo, el viejo es es casi mala palabra en Occidente.
– ¿Se inspira en alguien? ¿Hay una Ruth en la vida real?
– AR: El puntapié inicial es mi madre, que comparte muchas de las características de Ruth, después por supuesto está ficcionado. Pero partió de ver a mi madre con una vida muy activa, ya sin tener que trabajar o maternar porque sus hijos son grandes, y ocupa su tiempo en las cosas que le gusta hacer. Claro que hay achaques propios e la edad, pero lleva una vida plena. Y no solo eso, sino que le quedan un montón de años por delante. Ahora la gente cumple 90 como agua y el propósito de la novela es un poco mostrar otros aspectos de la vejez.
– Esto de mostrar otros aspectos es un poco quitarle el monopolio al discurso médico, que parece ser el único que puede hablar de la vejez.
– AR: Totalmente. Ruth va al médico y hay mucho de eso, porque no es un cuento de hadas sobre la vejez la novela, y se muestra también el desgaste del cuerpo que es real, pero sin embargo, también es real que tiene una vida. Muchoas al leerla me dicen 'che, pero no para de hacer cosas', y efectivamente, Ruth va a la ópera, sale con amigas y también estámuy lejos de esa imagen de la abuela, con la que se suele nombrar a los adultos mayores solo por ser mayores.
– Si pudieses resumir cuáles son esos aspectos ¿cómo los definirías?
– AR: Hay una cosa como de desconstrucción y de liberación que es porpia de esa etapa si se la sabe vivir. Uno ya no tiene ni que aparentar, ya se hizo lo que se tenía que hacer, y lo que no ya pasó. Ya está liberado de competencias laborales, institucionales. Ruth en un momento dice que siempre vivió medio como con un edificio sobre la cabeza, con mucho peso, mucho armado, mucho por sostener. Y ahora está en una etapa en la que hace con su tiempo lo que ella tiene ganas de hacer y si eso es quedarse todo el tiempo encerrada estudiando una obra, es tan válido como el plan de cualquier persona que se levanta para ir a trabajar.
– ¿Qué va a pasar este viernes?
– AR: Vamos a estar con Pau Turina y Ana Navajas, presentando el libro en Mal de Archivo (Urquiza 1613) lo que me entusiasma mucho porque me encanta Rosario. De hecho en el libro hay un pequeño párrafo dedicado a la ciudad, en el que Ruth se refiere al arte, que es lo que le interesa, y menciona a artistas como Berni, Nicola Costantino y muchos más, y dice que Rosario es es una pequeña Nación de Genios.