La pista en los teléfonos de Azum: cambiaba de número tres veces por semana
El Ministerio Público de la Acusación acusa al "Turco" de coordinar una red que financiaba búnkeres en toda la ciudad y de lavar el dinero obtenido por la venta de droga, mediante juego clandestino, usura, flotas de taxis y compra de propiedades. Se esperan peritajes clave en documentación y teléfonos
En 2018, cuando la justicia buscaba la ruta de las balaceras al Poder Judicial, realizó varios allanamientos. Uno de ellos fue en Balcarce al 3700, pasando bulevar Seguí. Las crónicas periodísticas de esos días relataron una situación que parece de película: los efectivos logran violentar un portón de seis pulgadas y el sospechoso que está adentro de la vivienda, intenta escapar al baño para tirar el chip de su celular, un I-Phone que antes había roto con sus propias manos. El protagonista de la escena es Yalil Roberto Azum, alias "Turco". Que no fue detenido ese día, pero sí varios años después. Y ahora se encuentra a disposición de la Justicia santafesina, sospechado de financiar kioscos de drogas y encabezar una asociación ilícita dedicada al lavado de dinero proveniente de ese negocio, el juego clandestino, la usura, flotas de taxis y compra de propiedades. Además, tiene abierta una causa federal, por la que se realizaron hace pocos días doce allanamientos simultáneos en Rosario, entre ellos al club Echesortu, donde habría funcionado una mesa de dinero. Se esperan los resultados de múltiples pericias para que la cause pueda avanzar.
Respecto de este último tema, que investiga en paralelo la Justicia federal, puede decirse que era vox pópuli que en esa tradicional institución deportiva del macrocentro rosarino, funcionaba en el último tiempo una mesa de dinero, administrada por el presidente y vice del club, con participación de Yalil Azum, plata del narcotráfico y relación con las barras de Central y Newell's. "Su nombre siempre estuvo relacionado con este tema del club Echesortu, hace tiempo se lo menciona", dijo la fiscal Viviana O'Connell, que lleva adelante las investigaciones del MPA contra Azum a nivel provincial, junto a su colega Alejandro Ferlazzo.
El teléfono roto y la detención por sorpresa
El apellido Azum empezó a sonar fuerte en ámbitos vinculados al delito hace algo más de cinco años. Su casa había sido allanada en 2018, cuando se buscaban pruebas de una de las balaceras al Centro de Justicia Penal. Y se lo sindicaba como financista del narco "Tubi" Segovia, jefe de la barra de Newell's que fue asesinado en la cárcel de Coronda. Ahora, se le adjudica ser el líder de una red de juego ilegal, préstamo de dinero, explotación de flota de taxis, negocios inmobiliarios y posibles vinculaciones con el tráfico de estupefacientes.
Según explicó la fiscal O' Connell, su detención se produjo luego de sorprenderlo en un estacionamiento, a pesar de ser una persona muy precavida. "No se resistió. Lo sorprendimos, cuando se presentaba con su auto en una cochera. Pero en alguna oportunidad anterior, que no me tocó investigar a mí, sí se había resistido a un allanamiento. Fue en su casa, en Balcarce al 3700, cuando se buscaba información por unas balaceras al Centro de Justicia Penal. Se ingresó a su domicilio, que tenía una puerta blindada. Y él arrojó el teléfono al inodoro, luego de romperlo con sus manos. Pero hablamos siempre de una persona que tomaba muchas precauciones. Todos los lugares que frecuentaba tenían cámaras, su casa también. Cambiaba de número de teléfono tres veces por semana. Sabemos que a veces su propia familia no sabía cómo ubicarlo. Por eso aquella vez, cuando se secuestró el chip de ese celular que tiró al inodoro, tampoco fue fácil conseguir datos. Esa investigación estaba a cargo de los fiscales Edery y Moreno".
La fiscal realizó las declaraciones a Radio Universidad de Rosario, donde planteó: "Detrás de toda la violencia en la que se ve inmersa Rosario, están los que ganan. Porque atrás de lo que vemos en los barrios, con chicos que disputan por el territorio, con homicidios y balaceras, está la ganancia que se produce, los que se benefician con este entorno que se ha vuelto sangriento. Ese es el delito que llamo de cuello blanco y que estamos investigando desde el Ministerio Público de la Acusación".
Una poderosa red de relaciones
Enseguida, O' Connell dio detalles de cómo llegó a Azum: "Lo primero que tuve yo a mi cargo vinculado a él, fue por una investigación que mis colegas venían haciendo sobre la banda de los Camino", recordó en referencia al clan narco que empezó a cimentar su poder con el manejo de la barra de Newell's. "Él estaba vinculado especialmente a uno de los integrantes de esa banda, que era 'Tubi' Segovia, que fue asesinado en la cárcel de Coronda en 2018. Lo que se pudo detectar entonces, después de varios homicidios que había habido en la ciudad, fue que Azum financiaba a Segovia, que a su vez tenía el armado en el territorio una red de bunkeres. El dinero se utilizaba para la compra de estupefacientes y luego de vendida la droga, esa recaudación era invertida por el mismo Azum en flotas de taxis e inmuebles y hasta les proveía los vehículos a los integrantes de la banda, que después se iba cobrando", agregó la fiscal.
En las audiencias que se vienen llevando adelante en estos días en el Centro de Justicia Penal, se presentaron escuchas telefónicas en las que Azum habla de políticos y jueces. "Una vez que van avanzando a nivel económico este tipo de delincuentes, buscan acercarse a quienes detentan poder. De las intervenciones telefónicas que tenemos, surge que Yalil Azum iba a reuniones en Puerto Madero. Se nombra arreglos con diputados, senadores, jueces y un 'Berni', que después la esposa del imputado desmintió que fuera el ministro de Seguridad bonaerense", sostuvo O'Connell, que explicó además el contexto de esas reuniones del financista del narcotráfico en la zona más glamorosa de Buenos Aires: "Fue en la previa de las elecciones de 2019. Buscaba cobertura, en caso de tener inconvenientes", dijo.
Narcotráfico y delito de "cuello blanco"
"El narcotráfico funciona como una especie de virus en la sociedad en la que se inserta. Genera desde el delito más pequeño, como el robo del consumidor porque necesita el dinero, el delito violento como las balaceras u homicidios, pero también el delito de cuello blanco, que es la parte más compleja. Porque ahí de lo que se trata es de ver adónde va a parar todo ese dinero cuando se inserta en el circuito legal", reflexionó también O'Connell.
En la continuidad de las audiencias, Azum será citado a declarar: "Como todo ciudadano, tiene derecho a no hacerlo. Si elige hablar, nosotros vamos a preguntar, entre otras cosas, por esas escuchas en las que habla de políticos vinculados al dinero del narcotráfico. No tenemos certeza de la cantidad de plata que movían, tendremos que analizar toda la información secuestrada en computadoras y teléfonos. Pero sabemos que eran muchos millones. En el día en que hicimos los allanamientos a la financiera que funcionaba en San Lorenzo al 1000, en la que se encontró la recaudación de ese día en esa oficina, había 2 millones de pesos y 8 mil dólares. Han llegado a pedir custodia para toda la cuadra, por tres días, para poder sacar el dinero que tenían ahí".
RosarioPlus pudo averiguar que el próximo paso en la causa se dará cuando concluyan los peritajes, no sólo de la densa documentación, sino sobre todo de los dispositivos electrónicos secuestrados. Si algo dejó en evidencia el juicio que se lleva adelante en estos días contra Guille Cantero y otros imputados por las balaceras de 2018 a objetivos judiciales, abrir los teléfonos y conversaciones de WhatsApp en este tipo de investigaciones, puede dar pie a una verdadera caja de Pandora.